Liquid Sky se presenta como un portal/ritual entre San Pedro de Atacama, lugar ubicado en Chile, al sur de América y el espacio de exhibición, en el contexto del Festival Internacional de la Imagen, situado en Manizales, Colombia. El lugar donde se concibe la obra no es azaroso, pues se origina desde la reflexión en torno a la identidad y el territorio. Asimismo, se suman a este punto de partida, el difícil contexto mundial de crisis cuyas dimensiones políticas, sociales, económicas, sanitarias, digitales, y medioambientales, nos hacen cuestionar la continuidad del modelo actual de desarrollo productivista/extractivista y la predominante forma occidental/eurocentrista de entender y comprender el mundo. Chile se suma a la crisis ecológica mundial y a la expoliación del llamado Tercer Mundo, donde la promesa de una sociedad más justa y libre, sustentada en la creación de riqueza a través de la dominación de la naturaleza y su uso para el beneficio común, condujo a una explotación excesiva y despreocupada de los recursos naturales. Estos cuestionamientos son ejes fundamentales en el proceso de concepción y creación de Liquid Sky. En el marco de este análisis el concepto “epistemología del sur” fue esencial, pues aportó en la reflexión sobre el desarrollo de los mecanismos de su funcionamiento. El sociólogo portugués Boaventura De Sousa Santos, propone la “epistemología del sur” como una contra epistemología que rompe el colonialismo del saber. Esta mirada contempla nuevos procesos de producción, validando así conocimientos científicos y no-científicos, de esta manera abre la posibilidad de que la ciencia no entre como monocultura, sino como parte de una ecología más amplia de saberes, valorando nuevas relaciones entre diferentes tipos de conocimiento a partir de las prácticas de las clases y grupos sociales que han sufrido de manera sistemática las injustas desigualdades y las discriminaciones causadas por el capitalismo y el colonialismo, conjugando de esta manera el saber científico con el saber popular, con el saber campesino y con el saber indígena. Desde una perspectiva de la epistemología del sur y con el fin de ampliar los saberes, el espejo de agua que presenta la obra se basa en los observatorios de piedra realizados por los Incas. Estas plataformas eran superficies planas construidas a partir de piedras esculpidas sobre las cuales se vertía agua para generar un espejo y así poder mirar el reflejo cenital del cielo en conjunto. Estos mecanismos eran simples y formaban parte de importantes rituales, asimismo eran un gran aporte en distintos aspectos de la organización social incaica. El acto de contemplar el movimiento del cielo y percibir el cambio de la luz aportaba en la creación de una conciencia colectiva uniforme, un encuentro donde todos estaban conectados con el cosmos.
Liquidsky Exhibition in Museo de Arte Contemporáneo MAC, CL - 2023 Image by Franciso Ibáñez1.- En San Pedro de Atacama, en un sitio provisto por nuestros colaboradores La Wayaka Current, una cámara de video de alta definición captura la imagen del cielo reflejado sobre la superficie de un espejo de agua giratorio y la transmite en vivo a Manizales durante un periodo de tiempo determinado, a modo de performance en vivo para el Festival de la Imagen. Una estructura metálica fija sostiene el cilindro con agua, un mecanismo de rotación y un mástil para ubicar la cámara sobre el artefacto, apuntando hacia abajo.
The mirror machine in Coyo, Atacama Desert, CL- 2022 Image by Liquidsky2.- Un motor eléctrico, conectado al eje del sistema de rotación, hace girar el cilindro para deformar la superficie del agua contenida, generando un paraboloide de revolución, y creando así un espejo cóncavo. Mediante esta operación se establece una relación directa entre la velocidad angular del motor eléctrico y la deformación de la imagen reflejada en el agua y capturada por la cámara.
Liquidsky team and mirror machine at Cerro Calán, CL - 2022 Image by Liquidsky3.- Un proyector recibe la imagen transmitida en vivo del cielo de Atacama, y la proyecta sobre el suelo en una sala oscura, en el contexto del Festival Internacional de la Imagen en Manizales, durante la performance propuesta. Al mismo tiempo, una serie de senores de movimiento instalados en la sala, detectan tanto la cantidad de personas contemplando la imagen como sus movimientos, generando una serie de datos respecto de su interacción con la imagen del cielo de Atacama proyectada en el suelo.
Liquidsky Exhibition in ARS Electronica 2022, AT - 2022 Image by Liquidsky4.- Los datos generados de esta interacción son procesados en vivo por un software de análisis de datos basado en la nube, generando un output que afecta de vuelta la continuidad de la velocidad angular del espejo de agua en San Pedro de Atacama, generando deformaciones en la superficie reflectante del agua y por ende, en la imagen proyectada.
Liquidsky in Museo de Arte Contemporáneo MAC, CL - 2023 Image by Franciso Ibáñez5.- Mediante esta serie de operaciones se ensambla un loop de retroalimentación, en el que el observador es traducido a interferencia, y la imagen interferida es devuelta al observador, desdibujando la frontera entre ambos y abriendo la posibilidad de una tele-contemplación. En un momento de la historia en el toda actividad humana parece estar duplicada digitalmente, LIQUID SKY nos hace reflexionar sobre la localidad de los fenómenos
Liquidsky in Museo de Arte Contemporáneo MAC, CL - 2023 Image by Franciso IbáñezHoy estamos en un contexto urgente y crítico, la escala masiva de la vida urbana, la sobrepoblación de imágenes/información y la crisis ocasionada por la pandemia del COVID-19 ha intensificado la experiencia urbana de auto-aislamiento e hiperconectividad. El filósofo y sociólogo alemán Georg Simmel planteaba hace 100 años los efectos de la expansión en la metrópolis en la formación de los sujetos y en la experiencia de individuación. Un eje central de la vida mental en este aspecto subyace en la tensión entre sobre estimulación y la llamada ‘actitud blasé’. Esta última se refiere a la indiferencia o apatía como forma de protección ante esta abrumadora realidad. Estamos sobre-estresados, exhaustos y agotados (burn-out), tratando de adaptarnos y entender lo que pasa, manejando el estrés en un marco de dependencia tecnológica que colinda entre la sobresaturación de algoritmos corporativos publicitarios, la adicción a las redes sociales y el consumo de las accesibles vidas privadas de las celebridades. El escritor, cineasta y filósofo francés Guy Debord, a fines de los años 60, conceptualiza la noción socio política del espectáculo, planteando que la vida se “espectaculariza” y comienza a vivirse a través de imágenes y que en lugar de acercar a las personas a la realidad, las alienan cada vez más de ella. En el imaginario el espectáculo ya no es asumido como un juego estético, fácilmente distinguible de la realidad, sino convertido en la realidad misma, de esta manera la realidad queda oculta, sustituida por un fetiche. La artista visual, cineasta, filósofa y crítica cultural Hito Steyerl, plantea que la realidad hoy, en los tiempos que corren, consiste en imágenes y que somos parte de un nuevo periodo determinado por la imagen digital denominado ‘documental post-humano’, una realidad social hipermediatizada por el mundo virtual, el cual pareciera actuar como régimen político y económico trastocando los modos de percepción, aplastando el tiempo humano y extrayendo sus afectos. Hoy existe una cantidad desmesurada de imágenes flotando alrededor del planeta, volviéndose vehículos predominantes en la circulación de conocimiento y en la configuración de las relaciones de poder en las sociedades de información contemporánea. La investigadora en tecnología satelital y medios globales; estudios críticos de infraestructura medial; medios, militarización y vigilancia, Lisa Parks, acuña el concepto de ‘capitalismo visual’, como un “sistema de diferenciación social” basado en el acceso relativo de usuarios y espectadores a las “tecnologías de los medios globales”. En este sentido, advierte cómo la globalización de las tecnologías y culturas mediales han establecido jerarquías de saber/poder y modos de diferenciación social basados en el acceso relativo de la gente a las interfaces de pantalla. Al vivir en un mundo plagado de imágenes, pareciera ser que la tecnología y el acercamiento al mundo digital debiese ser en principio accesible para cualquiera que tenga un televisor o un computador o un dispositivo móvil, sin embargo, esto oculta la desigual distribución de los bienes y las imágenes en las distintas culturas. En una era donde los medios y las imágenes saturadas nos abruman con información y las visualidades hegemónicas luchan por perpetuar las configuraciones de poder neoliberales, la imagen registrada, transmitida y proyectada en la obra Liquid Sky es atípica, pues propone una invitación a contemplar y reflexionar de manera personal y colectiva en torno a un fragmento del cielo, que si bien está ubicado en otro lugar, es el mismo que se mueve alrededor del mundo. Usando el espacio como medio telemático, internet transporta la imagen que se genera en el dispositivo tecnológico en Chile hacia la sala de exhibición. Asimismo la experiencia induce a sus espectadores a descubrir individual y grupalmente, a través de la percepción y de los sentidos, las posibilidades de interacción que presenta la obra. El aspecto de la imagen que aparece y lo que surge en totalidad en la sala es parte de una red y la experiencia será el resultado del encuentro único y particular entre las posibles conexiones y acercamiento entre los asistentes, los factores climáticos y el sistema técnico-tecnológico.
Liquidsky in Museo de Arte Contemporáneo MAC, CL - 2023 Image by Franciso IbáñezAl igual que una pantalla de LCD, donde los pixeles son moléculas de cristal líquido que se movilizan para generar una imagen, la estructura circular contiene moléculas de agua que giran gracias a un motor eléctrico, cuya amplitud de imagen puede modificarse de acuerdo a la variación de la velocidad de esta rotación. Por otro lado, al igual que una degradación en los píxeles de una pantalla LCD, el espejo podría presentar un glitch, pues la lluvia eventualmente podría interferir en el registro nítido del cielo. De todos modos, es una posibilidad poco probable en ese lugar del mundo. En la sala hay instalados una serie de sensores que detectan diversos factores, tales como tipos y calidades de movimiento o cantidad de personas reunidas en el lugar. Esta información es percibida por estos aparatos que están conectados al motor del espejo en Chile, modificando y generando posibilidades únicas en la imagen dependiendo del tipo de interacción. A través de los sentidos, la atención y la percepción, los asistes podrán explorar la obra, descubriendo y generando diversas posibilidades y descifrando tipos de movimientos o encuentros que pudieron haber influido en los resultados. En esta red, la escucha tanto personal como grupal, es muy importante. Ante los complejos efectos sociales, emocionales y los distintos tipos de violencia que vivimos hoy en día debido a las crisis multidimensionales que transitamos, pareciera ser que se vuelve cada vez más necesario desarrollar espacios de reunión que incentiven la escucha y la atención colectiva. Siguiendo esta dirección, Liquid Sky se presenta como un encuentro, una performance cuya retroalimentación es cíclica y ocurre gracias a la percepción e interacción entre sus asistentes en ese momento. Tal como ocurría en los observatorios incas, la contemplación del cielo se desarrolla en un espacio de reunión, donde la percepción, tanto individual como colectiva, es parte fundamental del ritual (fenómeno que solo ocurre en la presencialidad). La performance, según el sociólogo y filósofo Zygmunt Bauman sería una comunicación social estructurada (emisor-mensaje-receptor) que gira alrededor del tiempo presente y de la acción (el aquí y el ahora); es decir, es una representación que requiere de la interrelación de dos o más individuos enmarcados en un contexto determinado y bajo ciertos procesos normativos propensos a modificarse en la acción. No obstante, la aplicación teórica del rizoma a la performance abre una visión distinta y no lineal que provee otras maneras de significar el acto de comunicar que se acercan más a la visión que orienta este proyecto, ya que se expresa a través de nudos y conexiones. De acuerdo a los filósofos Gilles Deleuze y Félix Guattari no hay jerarquías ni distinciones entre objetos y sujetos, elementos abstractos y concretos y cualquier punto del rizoma puede y debe ser conectado con cualquier otro, enlazando eslabones semióticos, eslabones de poder y circunstancias relacionadas con las artes, las ciencias, las luchas sociales. Siguiendo estos lineamientos, la obra traza conexiones entre todos los agentes, la performance no sitúa un centro específico y todo se vuelve importante (procesos, humanos y no humanos): personas que operan la obra, asistentes, cuerpos, memorias, procesos de interpretación, emociones, impresiones, sus acciones-movimientos, la representación estética, dispositivos tecnológicos, códigos, internet, paisaje, espacio, el cielo, el agua, naturaleza, la obra artística y las personas que participan en la creación de la obra. La multiplicidad del rizoma permite pensar en lo intersticial, por lo que no indica una relación de unicidad, ni una identidad, de una división absoluta entre mundo y representación, sujeto y objeto, naturaleza y cultura. La performance desde una visión rizomática es inherentemente relacional y múltiple, no es sinónimo de la representación ni de la puesta en escena, conceptos que postulan conexiones lineales entre mundo e imagen, noción y realización. Asimismo, postula la importancia de no tratar de calcar o de reproducir lo mismo una y otra vez, sino de construir. Por otro lado, tal como se plantea en Liquid Sky, tiene múltiples entradas y salidas (input-output) y cada entrada abre distintos caminos, pero siempre se cruzan, redoblan, regresan y avanzan. Al funcionar en varias direcciones, se propagan interconexiones que se enganchan con otros “núcleos”, esto es lo que los filósofos llaman agenciamiento. Estos son aglomeraciones momentáneas de significación que contienen su propia estructura, su propia lógica, pero están propensos a alteraciones, resignificaciones y metamorfosis al encontrarse con otros, estas conexiones ocurren gracias a las líneas de fuga que aparecen. Es por todo esto que cada performance es distinta, pues se sitúa en circunstancias que involucran elementos aleatorios. De esta manera, podemos ver también que se mueve entre la tendencia centrífuga (para formar agenciamientos) y la centrípeta, es decir, ramificándose hacia “afuera”. La mirada rizomática de la performance rechaza la perspectiva tradicional del lenguaje y la comunicación(emisor-mensaje-receptor) ya que simplifica el acto de comunicar, pues los variados elementos que se involucran en el acto, como la gestualidad, los sonidos, los olores, las imágenes, los artefactos materiales o los movimientos, quedan establecidos en un marco ideológico y psicológico. Estos factores deben ser tomados en cuenta para comprender lo que se quiere expresar en un determinado tiempo y espacio. Liquid Sky, se sitúa como una performance/ritual pero desde una visión rizomática, rompiendo con el esquema binario, en tanto que se ve atravesada por la multiplicidad, por las interrelaciones que se suscitan en el momento de la acción y la derivación entre y hacia los distintos núcleos, formando una red de significación parcial. Es por esto también, que la obra se abre a la oportunidad de expandir la red, ya que contempla la posibilidad de crear un manual para la construcción del espejo de agua. Con el fin de volver accesible el arte y la tecnología, este manual contempla materiales de bajo costo. Al descargar el manual de la nube en cualquier parte del mundo, la obra se replica, se expande y se conecta en una red de ojos que contemplan y reflexionan en torno al cielo, pudiendo percibir y comparar sus cambios; cambios que eventualmente podrían ser notorios en el contexto de crisis medioambiental en el que vivimos.
Acknowledgments
We would like to express our gratitude to the following for their support and contributions:
- La Wayaka Current
- Nicole Waak
- Francisco Ibáñez (Studio Ibáñez)
- Miwire